LUXEMBURGO
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El Gran Ducado de Luxemburgo, su nombre oficial, es un país de Europa Central que limita con Alemania hacia el este, con Francia al sur y con Bélgica al oeste. No tiene salida al mar. Su organización geopolítica se divide en tres distritos, cada cual a su vez organizado en doce cantones. Su capital, Luxemburgo, es sede de numerosas instituciones y agencias de la Unión Europea.
El sistema político de Luxemburgo es de una monarquía constitucional y parlamentaria. Cuenta con poco más de 600 mil habitantes; se hablan tres lenguas oficiales: el luxemburgués, el francés y el alemán. Es miembro fundador de la Unión Europea. Su moneda es el euro. La economía se basa en las finanzas, la gestión de capitales e inversiones. Es el país con el ingreso más alto per cápita en el mundo.
La historia de los territorios luxemburgueses se remontan a una tribu de origen belga llamada los tréveros que ocuparon la región hasta la llegada de los romanos, quienes dominaron por varios siglos hasta que los francos se apoderaron de esos territorios. Ya avanzada la Edad Media, el territorio fue dividido entre varios reinos, como el de Lotaringia, el de Austrasia y el Sacro Imperio Romano Germánico. En el año 963, Sigfrido, conde de las Ardenas, adquirió Lucilinburhuc (lo que es el Castillo de Luxemburgo en la actualidad), siendo el origen del nombre del país.
Más adelante en el tiempo fue parte del Estado borgoñón, luego fue heredado al emperador Carlos V de España, hasta que en 1714 pasó a ser parte de la línea austriaca de la dinastía de Luxemburgo. A principios del siglo XIX estaba administrado por el Rey de Holanda, quien erigió a Luxemburgo como Gran Ducado. En ese mismo siglo, mediante otros tratados, una parte pasó a ser administrada por Bélgica. Durante la Primera Guerra Mundial fue ocupado por los alemanes, pero tras la derrota alemana, Luxemburgo volvió a restaurar su monarquía, con los Nassau al frente. Sin embargo, la Alemania nazi volvió a ocupar estas tierras hasta que, tras la conclusión de la Segunda Guerra Mundial, en 1947 Luxemburgo firmó un tratado de aduanas y comercio libre, el llamado Benelux, con Bélgica y los Países Bajos.
QUÉ HACER EN LUXEMBURGO
En opinión de muchos quienes han estado aquí, Luxemburgo capital es una de las ciudades más hermosas de Europa, elegante y tranquila. Antiguamente, su casco estaba completamente amurallado y en la actualidad aún perviven partes de la muralla medieval. En pleno corazón de la ciudad por supuesto que lo primero que uno encuentra es la catedral católica de Santa María o Notre Dame, levantada en 1613 en estilo gótico.
Como la ciudad es relativamente pequeña, a pocos pasos de la catedral se encuentra el Gran Palacio Ducal, un majestuoso edificio que es residencia de los duques de Luxemburgo y sitio de eventos oficiales. Vale la pena tomar en cuenta que sólo desde mediados de junio a finales de agosto se permite la visita de turistas en áreas no restringidas. Visitarlo es en verdad una experiencia sinigual.
En Luxemburgo existen varios museos con diferentes temas, siendo los de historia y los de arte los más numerosos y ricos en colecciones. El Museo de Historia de la ciudad de Luxemburgo, el Museo Nacional de Historia Natural, el Musée Dräi Eechelen que se enfoca en la historia del país de 1443 a 1903 y tiene largos túneles subterráneos; el Museo Nacional de Historia y de Arte, el Museo de Arte Moderno Gran Duque Jean (MUDAM) que incluye un parque de esculturas y estatuas. El Castemates du Bock, también de arte moderno, incluye secciones peatonales al aire libre en partes antiguas medievales. Y por supuesto hay museos con otros temas, como el Museo de la Banca y el Museo del Tranvía o el Museo del Automóvil.
Con sólo citar estos museos podemos decir que la ciudad de Luxemburgo también reboza cultura. Tan es así que hay una ruta llamada “La milla de los 7 museos” porque en un recorrido de poco más de un kilómetro y medio encuentras siete museos, algunos de los citados arriba e incluyendo el Casino Luxemburgo, de arte moderno, y la Villa Vauban cuyo atractivo son las obras de los siglos XVIII y XIX. Ésta es una de las rutas culturales más recomendable para aquellos visitantes que deseen apreciar el arte y la cultura luxemburguesa y europea.
Un lugar emblemático que hay que visitar, antes o después de un refrigerio o buena comida, es el Chemin de la Corniche, un mirador cerca del palacio ducal y de la catedral, desde donde se aprecian las mejores panorámicas de la bucólica ciudad. Verano o cualquier día soleado es inmejorable para hacer esa caminata y disfrutar la tranquilidad y las panorámicas.
Luxemburgo es un país que se caracteriza por su territorio montañoso, de rasgos rocosos y con grandes extensiones de bosques. El turismo de actividades al aire libre ha encontrado aquí numerosas rutas de ciclismo de montaña, de senderismo, de alpinismo y, por supuesto, de esquí que están catalogadas en fácil, moderado y difícil.
Para hacer senderismo existe la Müllerthal Hiking Trail que tiene tres rutas bien definidas. La ruta número 1 pasa por el pueblo de Rosport, donde puedes visitar el Museo Henri Tudor ubicado en una antigua casona considerada como castillo que fue levantada en 1892. En otras rutas encuentras cascadas, grutas y paisajes boscosos.
Seguro sabes que…
En París existe el famosísimo Jardín de Luxemburgo, de 22.45 hectáreas. Toma su nombre por el Palacio de Luxemburgo que es la sede del Senado francés. El jardín empezó en 1614, gracias a la riqueza de María Médici. De lo original sólo queda la llamada “gruta del Luxemburgo”, que es la fuente dedicada precisamente a su fundadora: María Médici.
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Este video con paisajes de Luxemburgo y música relajante.
Referencias de Internet:
Los créditos de imágenes aparecen al pie de la imagen correspondiente.
Adaptación de textos: Homero Adame
Luxemburg texts translation into English: Pat Grounds