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La República de Serbia es un país sin salida al mar, situado al sureste de Europa, en la península balcánica. Sus colindancias territoriales son al norte con Hungría, al este con Rumanía y Bulgaria, al sur con Macedonia del Norte y Albania, y al oeste con Montenegro, Bosnia-Herzegovina y Croacia. En el mapa se aprecia Kosovo, al sur, como una región serbia; sin embargo, cabe señalar que éste es un territorio en disputa, dado que se considera una república independiente, la cual no es reconocida por Serbia ni muchos otros países. Si se quita a Kosovo como región serbia, entonces Albania no tiene colindancias territoriales con Serbia.
Con casi siete millones de habitantes, el idioma oficial y más hablado es el serbio, pero también se hablan otras lenguas en regiones fronterizas, como el húngaro, albanés, ucraniano, croata y eslovaco, además del romaní que es la lengua de los gitanos. El serbio se escribe con caracteres del alfabeto latino y también de cirílico. Sin tener una religión oficial, la mayoritaria es la ortodoxa serbia. Hay otras minoritarias, como el musulmán en la parte sur, en Kosovo primordialmente.
Serbia es un estado soberano con forma de gobierno de república parlamentaria. Pertenece a las Naciones Unidas y es candidato a ser miembro de la Unión Europea. La moneda de uso corriente es el dinar, cuya equivalencia en pesos mexicanos es de .21 centavos por dinar (febrero de 2021).
Existen evidencias arqueológicas de ocupación humana desde la época neolítica en territorios que ahora son Serbia. Siglos más tarde, antes de la llegada de los griegos y luego los romanos, las tierras estaban habitadas por grupos paleobalcánicos, como los dacios, ilirios, tracios y celtas, estos últimos de relevancia porque fundaron muchas poblaciones que son el origen de ciudades modernas serbias.
Para el siglo IV de nuestra era, los territorios balcánicos eran parte del Imperio Romano de Oriente que luego se transformó en el Imperio Bizantino. Entre el siglo VI y VII arribaron los primeros eslavos, siendo quienes con su legado cultural dieron la identidad serbia. Entre 1346 y 1521 existió el Imperio Serbio que fue muy extenso y uno de los mayores de Europa en la época del zar Esteban IX Uroš IV Dušan.
Los siglos siguientes fueron convulsos, como lo fueron en la región balcánica, con levantamientos, guerras, ocupaciones. Durante el periodo de los Habsburgo y el Imperio Austrohúngaro fue difícil para Serbia, que fue invadida en la Primera Guerra Mundial. En las entreguerras se formó el efímero Estado de los Eslovenos, Croatas y Serbios que luego fue un efímero reino que pasó a llamarse Reino de Yugoslavia cuando se adhirieron otros países como Montenegro. En 1941 los nazis invadieron Yugoslavia. A finales de 2944, el Ejército Rojo liberó a Yugoslavia de los nazis y al año siguiente se formó la República Democrática Federal de Yugoslavia, compuesta por seis repúblicas bajo el abrigo de la Unión Soviética. Las décadas siguientes fueron también muy complicadas. En 2005 Montenegro se independizó de Serbia y en 2008 Kosovo trató de hacer lo mismo, sin que ésta sea reconocida por Serbia. En la actualidad Serbia es un país con gran empuje y dinamismo para logar sus objetivos de modernidad.
QUÉ HACER EN SERBIA
Serbia es un país que poco a poco se ha ido dando a conocer al mundo del turismo, tan así que Novi Sad ha sido designada como “Capital Europea de la Cultura” para este 2021. Siendo la segunda ciudad de Serbia y apenas a una hora al norte de Belgrado, se le conoce como la “Atenas serbia” gracias a su historia y el alto nivel de cultura. Su nombre significa “Jardín nuevo” y pese a tener siglos de antigüedad, se le considera como una ciudad joven porque fue reconstruida después de haber quedado prácticamente devastada durante las muchas guerras del siglo XX.
Es muy agradable conocer Novi Sad caminando y entre los recorridos es muy recomendable las orillas del río Danubio que divide y atraviesa la ciudad. A todo lo largo de la caminata hay tiendas, cafés y restaurantes al aire libre. También es muy recomendable un paseo en bote, principalmente al atardecer o por la noche, cuando el clima es más fresco y la iluminación de la ciudad es espectacular. Por cierto, en Novi Sad puedes tomar un crucero a otras ciudades y capitales europeas irrigadas por el bucólico Danubio.
La Fortaleza de Petrovaradin es un lugar histórico e impresionante. Su construcción empezó en 1692 y terminó en 1780, convirtiéndola en la fortificación más grande de Europa en el siglo XVII y la más importante del Imperio Austrohúngaro en la región balcánica. Desde el restaurant Terassa, en la cima, de aprecian inmejorables panorámicas de Novi Sad y el Danubio.
Belgrado es la capital serbia y otra maravilla por su historia, si vivacidad, su riqueza cultural. Situada donde convergen los ríos Sava y Danubio, por su ubicación estratégica se le conoce como “La puerta de los Balcanes” o “La puerta a Europa Central”. La riqueza cultural se concentra en museos como el Nacional, el Militar, el de Arte Contemporáneo y el Nikola Tesla. Aunque Nikola Tesla es considerado un inventor norteamericano con ascendencia serbia, lo cierto es que el museo dedicado a él en Belgrado es en verdad impresionante por la colección de objetos, inventos, bártulos, medallas, modelos a escala de sus descubrimientos y nada menos que alrededor de 160 mil documentos en el archivo Tesla. Dicho archivo está inscrito en el Registro de la Memoria del Mundo, por la UNESCO.
Si párrafos arriba mencionamos el aclamado festival de música EXIT que se realiza anualmente en Novi Sad, ahora mencionaremos que en Belgrado tienen el BITEF, el Festival Internacional de Teatro de Belgrado donde cada año se dan cita las mejores compañías teatrales del mundo que enfocan sus obras en temas social y políticamente provocativos. Son varios los escenarios donde se presentan las obras, como el Teatro Nacional que, mención aparte, en el mes de abril es sede del Festival de Danza de Belgrado.
Más allá de las ciudades serbias, existen otras maravillas que puedes conocer como sus monasterios medievales que parecen ser recreados de los cuentos de hadas, hacer rutas temáticas como la de los Emperadores Romanos, la ruta Transcománica o la Ruta del Vino del Danubio que forma parte de las Rutas Culturales del Consejo de Europa e incluye cuatro países: Bulgaria, Croacia, Rumanía y Serbia. Los vinos más populares se producen en Negotinska Krajina y entre sus variedades e tintos están el Borgoña negro, Gamet y Prokupac, estas últimas poco conocidas en México. En cuanto a los vinos blancos, producen variedades de Bagrina, Riesling, Sauvignon, Smederevka y Semillón.
En el lado serbio hay viñedos que datan de la época romana en Vršac donde existe una magnífica catedral adherida al culto ortodoxo rumano. En Fruška Gora también hay monasterios ortodoxos y una tradición vinícola antigua, así como un parque nacional y prístinos paisajes.
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Marina Abramović es una artista serbia que se considera “la madrina del Performance”. En esta página puedes leer salgo sobre la vida artística de Marina:
https://graffica.info/marina-abramovic-la-madrina-del-arte-de-la-performance/
Y en este video (en inglés) tenemos una explicación en voz de la misma Marina sobre su arte y sí misma:
Referencias y créditos
Los créditos de textos / imágenes aparecen al pie de la imagen correspondiente
Selección de textos y fotografías: Rosalba Márquez y Homero Adame
Adaptación de textos: Homero Adame
Serbia – traducción al inglés: Pat Grounds
Teléfono: 4151217277
Correo: [email protected]
Dirección: San Francisco #23, Zona centro, Cp.37700, San Miguel de Allende , Gto
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